En primer lugar, a modo de introducción, les plantearía la pregunta que a todos nos han hecho alguna vez: ¿qué es la literatura? De este modo, sabré los conocimientos que tienen los alumnos sobre este tema. A través de las respuestas que den, podremos crear una definición definitiva. Habrá alumnos que no sepan nada sobre este tema, por lo tanto, les pasaré unas fichas donde a través de imágenes de autores literarios.

En las siguientes sesiones, trabajaría la asignatura de la siguiente manera: si estamos hablando del siglo XVIII, repartiría la materia en tres bloques: prosa, poesía y teatro. Para esto, haría grupos de tres para que cada grupo pudiera trabajar estos tres bloques. En cada bloque, deberán elegir un autor y una obra.
Una vez que han trabajado este trabajo, deberán presentarlo delante de la clase. Después, contestaremos entre todos las dudas que puedan surgir entre los alumnos. Puede que se repitan los autores, para ello, el profesor ayudará a los alumnos a trabajar diferentes aspectos.

Cuando hayamos hablado de todas las corrientes y épocas literarias, propondría que hicieran una línea del tiempo para que así no olvidemos nunca las ideas generales de nuestra literatura, que es muy preciada. De este modo, los alumnos son los protagonistas del aprendizaje y el profesor va a guiar a los mismos. Si les damos todo hecho, no van a aprender nada, sin embargo, si trabajan ellos y si resuelven las dificultades que encuentran en el camino, entenderán muchas cosas más.
